Le dedicaron un reportaje en un programa del corazón (a veces ponen cosillas que sí vale la pena ver) y yo lo escuchaba de fondo mientras barría el comedor.
Me quedé parada, hipnotizada. Fue como si esa voz maravillosa entrara en mi corazón y lo besara con amor.
Para mi santo de ese año sabía qué regalo quería. Con el dinero que me dio mi padre me compré el disco "Maria Callas, la leyenda", dos discos recopilatorios con sus arias más famosas.
¡Escucharlo por primera vez fue tan emocionante!
Desde entonces esa voz, ese arte, esa personalidad única e inigualable acompaña mi vida, mi descanso, mis tardes...
La colección de discos y libros de la diva ha aumentado considerablemente, también las imágenes de su vida y, sobre todo, de su legado artístico. Curiosamente, prefiero saber más de su trabajo que de su vida personal tan tumultuosa y que, considero, distorsiona su pasión por el canto y su huella en la historia artística del siglo XX.
¡Qué lástima que no se grabaran en imágenes todas sus óperas!
¡Qué lástima que ningún compositor hiciese una ópera para ella!
Menos mal que podremos disfrutar de esa voz y de ese genio que llega al corazón y se queda allí para siempre.
Que bonito Carmen! Que bonito tener una pasión! cuando algo gusta, y gusta tanto.. se nota, se huele,se palpa.. disfruta tu pasión porque es preciosa! yo siempre eché de menos tener una que al menos.. me dejase una sola vez sin aliento..
ResponderEliminarEso es lo que envidio de Carmen esa pasión innata que tiene
ResponderEliminarEs que fue todo un flechazo :P
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