Que la semana santa de Málaga vaya cogiendo cada vez más fama nunca me ha parecido mal, de hecho siempre ha sido deseable, pero si un martes santo va a estar tan atestado de gente y, sobre todo, de gente a la que no le gusta la semana santa y que no mira los tronos y que no se sabe callar ni estar, prefiero mil veces que nadie conozca nuestra semana santa.
Ayer me agobié y yo nunca me agobio con la gente. He podido estar rodeada de gente en una bulla, que ni p´alante ni p´atrás, y sin problema y ayer me agobié, tanto, que a punto estuve de volverme para mi casa.
Un martes santo, aunque con mucha gente, siempre ha sido un día más tranquilo, en el que se podía callejear, pero ayer imposible. Y lo que más miedo me da: si esto fue en un martes no quiero ni pensar lo que ocurrirá el jueves con todo lo que acarrea la legión más diez mil cruceristas que se esperan. Uff qué horror! Me veo por los alrededores pero sin pisar el centro ni de coña!
Aún así, aquí están algunas imágenes que pude tomar anoche:
Cristo de la Humillación, hermoso, profundo, imponente. Además, para fotografiar, es una imagen muy agradecida, le hagas la foto que le hagas, siempre es una pedazo fotografía. Me encanta!
La virgen de la Estrella, que acompaña a la Humillación, saliendo de santo Domingo al atardecer.
Nunca conseguiré sacarle una foto en condiciones al cristo del Rescate, pero como la virgen me gusta más pues nada. La virgen de Gracia es preciosa, su trono es de los más bonitos que procesionan y el único de Málaga de estilo gótico. El palio es una maravilla y anoche, especialmente, estaba bonita la virgen con la manera que tuvieron de vestirla. De dulce todo el conjunto.
El señor de la Sentencia. Es del mismo autor que el Cautivo y se parece, muy guapo.
La virgen del Rosario, acompaña a la Sentencia. Esta virgen no es precisamente guapa, pero a mí me gusta mucho. Me he dado cuenta que me gustan más las vírgenes con caras más imperfectas que aquellas que son tan guapetonas. Esta virgen me inspira mucha ternura no sé por qué.
Cristo de los Pasos en el Monte Calvario, por plaza de la Merced, encaminándose hacia su barrio de la Victoria.
Virgen del Rocío, novia de Málaga. Bonita, alegre, no pega nada con una semana santa, pero así es la de Málaga. Donde quiera que va se le grita guapa y en la Tribuna de los Pobres se rompen los esquemas!
Cristo de la Agonía de la antipática cofradía de las Penas. Las imágenes son preciosas y el orden de la procesión muy digno, pero no puedo evitar que me desagrade esta cofradía, cada año dan un pasito más para parecer una cofradía sevillana, lo único que les falta ya es sacar los tronos con costaleros, aunque para eso no creo que tengan tantos cojones, la gente se les echaría encima y con razón.
De todos modos, ayer metieron mucho la pata: como siempre buscan calles estrechas, se metieron por una en la que el trono cabía pero no se dieron cuenta de los cables y ahí se quedaron plantados que ni para adelante ni para atrás. ¡Anda, los que van de perfectos! ¡hay que mirar a las alturas además del ancho de las calles!
La virgen de las Penas lleva el manto bordado de flores (otra costumbre que quisieron quitar, pero no pudieron) pero, como cometieron ese error no nos quedamos a esperarla y no lo vi.
Por el camino, nos encontramos con mi cristo de la Humillación, llegando a Tribuna de los Pobres, donde dejan los restos.
Subiendo hacia el puente de la Aurora, la cofradía de Nueva Esperanza del barrio, lejano del centro, de Nueva Málaga. Son los más valientes, los que tienen el recorrido más largo, si no llegan a las 12 horas procesionando poco falta. También les tengo mucho cariño porque medio colegio Gamarra está metido ahí y les he visto casi desde sus inicios, cuando procesionaban hasta la ermita de Zamarrilla y se daban la vuelta. Este año han cambiado el recorrido, para meterse por la Trinidad y saludar en la casa hermandad del Cautivo, osea, no sólo tienen el recorrido más largo es que no se cansan y quieren más.
No hay comentarios:
Publicar un comentario